Una salsa de tomate siempre debe de haber en nuestra nevera/congelador, es una preparacion muy versátil y por lo tanto se puede acomodar en muchos platos.
En el mercado hay buenas salsas de tomate frito y tal vez no les interese utilizar una salsa de tomate casera, si es así, no siga leyendo. Las recetas que publicaré las podrán hacer perfectamente con salsa de tomate frito industrial.
Hacer una salsa de tomate en casa es muy sencillo, no cuesta mucho tiempo y es barata, por supuesto más barata que las compradas.
Esta salsa de tomate con cebolla es básica, luego a la hora de utilizarla se le puede saborizar con aromáticas, pimienta molida etc.
Comenzaremos poniendo dos o tres cucharadas de AOVE (Aceite de oliva virgen extra), como ven justo que cubra el fondo de la cazuela.
En este aceite una vez caliente sofreímos un diente de ajo.